Según el jefe comunal, estos incrementos están generando una carga insostenible para los hogares del distrito. “Hoy, casi el 60% del gasto de una familia está destinado a pagar servicios. Una locura”, remarcó. Las subas tarifarias, que comenzaron a aplicarse a fines de 2023, continúan profundizándose mes a mes sin una política de contención social clara por parte del Gobierno nacional.
Gray sostuvo que los aumentos no solo afectan la economía doméstica, sino también el tejido social. “Estamos viendo cómo muchas familias deben recortar en alimentos, salud o educación para poder cumplir con el pago de los servicios básicos”, indicó. Desde el municipio, aseguran que se están evaluando medidas para asistir a los sectores más golpeados.
En ese contexto, el intendente llamó a una revisión urgente de la política tarifaria nacional. “No se puede seguir ajustando sobre la clase media y los más vulnerables. Esto está generando un daño profundo en la calidad de vida de nuestra gente”, concluyó.